Onésimo trabaja con delanteros y extremos tácticas de ataque

· Artículo de Alberto Gómez

El Real Murcia continuó preparando este miércoles su próximo compromiso liguero contra el Real Recreativo de Huelva en la Nueva Condomina. Lo hizo con una sesión de entrenamiento matinal desarrollada en las instalaciones de Cobatillas y que tuvo una duración de dos horas. El trabajo comenzó con media hora de retraso con respecto a la hora prevista porque el cuerpo técnico y la plantilla estuvieron compartiendo impresiones dentro del vestuario a puerta cerrada.

Onésimo volvió a contar con las bajas de Saúl Berjón y Mauro Dos Santos. Ambos trabajaron en solitario en el gimnasio para no perder en demasía la forma física. El argentino hizo un viaje relámpago a Argentina para solucionar un tema burocrático y esta mañana ya estaba en Cobatillas.

Por otra parte, el entrenamiento arrancó en el campo anexo bajo las órdenes de Xavi Bartolo, preparador físico del equipo, quien supervisó dos vueltas al terreno de juego en carrera continua y una serie de estiramientos que los jugadores realizaron por parejas. Acto seguido, la plantilla se dividió en grupos de cuatro integrantes para realizar ejercicios de control y pase en corto aumentando la intensidad de la práctica de forma gradual.

Foto: Miguel Ángel Ayala

Asimismo, los tres porteros del primer equipo, Alberto Cifuentes, Javi Jiménez y Fernando, así como Simón Ballester, guardameta del filial, comenzaron trabajando con Avelino Viña, preparador de porteros, en el terreno de juego principal. El entrenador uruguayo dispuso una serie de paradas desde corta distancia por bajo. Después, los metas se integraron con el resto del grupo y se dividieron en un grupo de siete jugadores y dos de ocho para realizar rondos en los que dos integrantes trataron de robar el balón a sus compañeros. Durante esta práctica, Onésimo resaltó la importancia de ejecutar cambios de dirección y la idoneidad de buscar espacios libres bajo presión.

 Despliegue de ataque 

En esta ocasión, el trabajo táctico se desarrolló en el campo principal con un partido en el que participó toda la plantilla con dos porteros por bando. El objetivo que marcó el entrenador fue el de mejorar la circulación del esférico y potenciar la llegada al ataque por ambas bandas. Durante el tiempo de juego, Onésimo recordó: “Vivo del gol gente, quiero goles”. Además, aconsejó a sus jugadores: “El fútbol es inventar, hay que inventar sobre la marcha gente”. En el transcurso del encuentro, el técnico ordenó que cada integrante no diera más de dos toques antes de pasar el balón y felicitó al Rusito Martínez por las buenas llegadas al ataque que demostró actuando como extremo derecho. Asimismo, One destacó la importancia de recuperar la posición inicial cuando acaban las jugadas de ataque y colocó a Eddy y Matilla en el centro del campo como distribuidores de juego. Aún así, el equipo teóricamente titular contra el Recre puede ser el formado por Javi Jiménez, Molinero, Jorge, Catalá, Óscar Sánchez; Sutil, Eddy, Toribio, Emilio Sánchez; Quique García y Cristian García debido a que en el otro conjunto se encontraban todos los canteranos y gente que no podrá jugar por suspensión como Nafti y Matilla.

Foto: MÁA

Por otra parte, durante el partido de prueba, One probó de forma indistinta con defensa de tres o cuatro y recalcó a Higinio, Quique García y Ruso la importancia de que esperen los rechaces cuando disparen a portería los jugadores del centro del campo. Precisamente al primero, el técnico le aconsejó que trabaje con mucho ritmo las jugadas de ataque para incrementar el número de goles que lleva en lo que va de temporada, cuatro, cantidad insuficiente para un punta a estas alturas de campaña, según le manifestó el propio Onésimo. El final del partido dio paso a otro ejercicio para practicar la presión al rival desde la salida del balón y el Chincheta argumentó que es preferible que los defensas manden el balón fuera de banda a que conduzcan hacia atrás y desestabilicen al equipo por obligarle a que se tenga que retrasar muy rápido. De igual modo, el técnico reiteró a la plantilla la importancia de entrenar siempre como si se estuviera en una situación de juego real para evitar relajaciones de sus nombres.

Jorge y Quique fijos 

Otro rasgo en el que el entrenador puso mucho interés es en dotar al juego de ataque de pausa salvo que exista una oportunidad muy clara. De esta manera, explicó, se evitarán pérdidas de posesión innecesarias. Durante esta práctica, el míster varió a todo el grupo presuntamente titular a excepción de Jorge en defensa y Quique en punta. Además, fue a este conjunto al que le recalcó la necesidad de bascular el juego cuando esté volcado hacia un lado para, de esta manera, lograr abrir huecos. Por otra parte, en este ejercicio tuvo una actuación muy destacada Sutil con buenas internadas y pases en la posición de extremo izquierdo suministrando de balones de peligro a Quique y Ruso. Igualmente, el andaluz ejerció muy bien la presión sobre la defensa rival.

División del grupo 

Al término de esta prueba, Onésimo llamó a Alberto, Javi, Eddy, Emilio, Jonatan Gómez, Sutil, Rusito, Matilla, Miguel Albiol, Quique, Ruso e Higinio y mandó al resto con Xavier Bartolo para que hicieran unos estiramientos finales en el gimnasio y se aplicaran posteriormente hielo para evitar la aparición de lesiones musculares. Por su parte, el grupo llamado por el técnico afrontó una práctica en la que el media punta (Matilla, Eddy y Emilio) abrió el juego a una banda para que los extremos (Jonatan, Sutil, Albiol y Rusito) centraran en búsqueda del remate de los delanteros (Quique, Ruso e Higinio). Para dotar al ensayo de más realismo, el técnico introdujo la presencia de paredes, regates y desmarques para organizar la táctica de ataque que debe seguir el equipo en los partidos. Para ello, empleó a cuatro muñecos de plástico situados al borde del área y dos más por delante.

Para la siguiente parte del ejercicio, se quedaron únicamente los extremos y delanteros, mientras que Eddy, Matilla y Emilio enfilaron el camino a los vestuarios. Los siete jugadores restantes realizaron series de cuatro disparos, dos con cada pierna, a pase del entrenador y sin poder realizar ningún control. Luego, los integrantes decidieron con qué pierna preferían disparar y, para terminar, todos los jugadores formaron una barrera humana para que el técnico elevara el balón por encima de ella y nombrara a uno de los integrantes al azar para que chutaran a portería, primero, sin ningún control previo y, luego, controlando el esférico. En este ejercicio, demostraron tener buena puntería y precisión Rusito, Albiol, Quique y Ruso. Además, para terminar la sesión, Quique y Jonatan se quedaron practicando el lanzamiento desde el punto de penalti. Todo ello, con una implicación constante de Onésimo que estuvo en todo momento corrigiendo a sus hombres, inculcándoles la importancia de que hagan goles y reiterándoles la necesidad de acudir a todos los rechaces de las jugadas de ataque.


PD1: Los árbitros y la violencia.

PD2: Entrevista a Juan Antonio Samper. Señalando al Chuti Molina.