Su misión como presidente del Real Murcia la tiene clara. Ahora su objetivo es pelear porque se hable de fútbol y conseguir que haya apoyo del público. Lo suyo va a ser generar ilusión pero para ello necesita que los goles entren y que el equipo dé alegrías.
Guillamón no quiere hablarle a la prensa de 'cuartos'. Precisamente ayer estuvo en Madrid para eso, reunido con Rafael Núñez (el tesorero vivió en persona la victoria grana en Alicante) y con Juan Manuel Trujillo. Las tres patas del proyecto cavilaron las posibilidades para salvar hasta el mes de junio la mala situación económica del club.
Todavía no han hecho público qué plan van a llevar a cabo, parece que siguen estudiando las cuentas y esperando asesoramiento de los auditores.
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